TERTULIA DE MUJERES

En una reunión de amigas y compañeras, comentaba yo, la sensación que percibí en mi visita a Mula con motivo de la presentación del CDL en esta localidad. La explosión de vida que se respiraba en sus calles, las terrazas repletas de mesas con gente tomando el fresco mientras cenaban o tomaban helados. Niños jugando al balón en las plazoletas y sobre todo la mezcla de gente joven y no tan joven deambulando por sus calles.
Les comenté que pueblos en los que yo había frecuentado como Lorca o Totana ocurría lo mismo, con lo cual mi pregunta era: ¿Qué está ocurriendo en Alhama?
Una de ellas defendía que en Alhama había habido unos años de prosperidad económica y que la gente se había comprado su segunda vivienda y eso era una causa de que las calles de Alhama estuvieran desiertas (exceptuando a los inmigrantes que no tenian otra opción). Por supuesto, yo no compartía su opinión. Aunque había opiniones diversas y contrapuestas, sí que todas fuimos lo suficientemente razonables para poder mantener una conversación sin molestarnos por la opinión de las demás.
A lo que quiero llegar. Por unanimidad estuvimos de acuerdo, después de exponer cada una su criterio y argumentar sus razones, en que Alhama está muy descuidada en cuanto a motivación de sus gentes. Es cierto que sus ciudadanos muestran apatía ante los problemas que tenemos, pero también queda demostrado que en los asuntos en los que los políticos han mostrado mucho interés, la gente ha respondido. Quizás los políticos no han ofrecido alternativas para no tener que irse a buscarlas fuera: paseos con terrazas donde la gente pueda sentarse tranquilamente con un ambiente agradable; espacios ajardinados con alternativas para que jóvenes y adultos se puedan mezclar sin que exista ningún problema por ello. La conclusión final a la que llegamos: ¡Cuánta falta hacen en Alhama espacios comunes que nos ofrezcan ocio, intimidad y que a la misma vez nos ayuden a relacionarnos con nuestros conciudadanos!

Ana Fernández Bastida, Secretaria General CDL Alhama.